LECTURA CRITICA

Docente:
Laura Marcela Aguirre Ortega:

Oraciones enunciativas

Para saber cuántas clases de oraciones hay, empezaremos con las enunciativas ya que probablemente sean las más comunes. Estas implican una actitud por parte del emisor de información.

Es decir, cuando vas a hablar de un hecho concreto, usas un enunciando concreto. Así pues, dentro de estas oraciones enunciativas encontramos dos grandes grupos, las negativas y las afirmativas. Veamos en qué consiste cada una con un pequeño ejemplo:

• Oración enunciativa afirmativa: se usa cuando se afirma un hecho con diversos grados de rotundidad. Como ejemplo, puede servir: Me dejaste el libro de El Quijote en enero – Te devuelvo tus cómics.
• Oraciones enunciativas negativas: igual que se puede afirmar un hecho, también se puede negar con más o menos seguridad: Tu hermano no ha pasado por aquí esta tarde – No me gustan los caramelos de menta.

Oraciones interrogativas

Otro de los grandes grupos de oraciones que se usan según la actitud de un emisor son las interrogativas. Como es obvio, no somos perfectos, así que no sabemos todo de todo y todos en cualquier momento, por lo que habrá situaciones en las que hemos de preguntar.

En este caso, las oraciones interrogativas también se dividen en dos grupos primordiales, las que contienen una forma directa y las que se usan de manera indirecta. Lo vemos con unos sencillos ejemplos:

• Se usa la oración interrogativa directa cuando la pregunta va entre interrogaciones y sin preámbulos o artificios diversos: ¿Cuándo te has comprado esa camiseta tan bonita? - ¿Qué te vas a poner para la fiesta?
• Por lo contrario, utilizamos las oraciones interrogativas indirectas cuando la pregunta no es directa, por ejemplo: Me gustaría preguntarte por tu hermano – Quisiera saber qué harás esta tarde.

Oraciones imperativas

Veamos ahora el último caso en que encontramos oraciones de diversos tipos dentro de un mismo grupo, aquí hablando de las imperativas.

Las oraciones imperativas se usan cuando el emisor emite una orden. Por lo general, el verbo se conjuga en modo imperativo, aunque también se puede utilizar el futuro simple, el infinitivo precedido de A o el presente de indicativo. Además, existen las frases imperativas negativas o prohibiciones. Veamos los casos:

• Una oración imperativa normal sería: Pon toda tu ropa sobre la cama – Sacude el mantel de la comida.
• En caso de usar el futuro simple, podemos conjugar así: Harás todo lo que te diga antes de las cinco de la tarde – Subirás y bajarás estos escalones diez veces.
• Para el infinitivo precedido de A tenemos estos ejemplos: ¡A comer todo el mundo! - ¡Toda la clase a callar!
• En el caso de presente de indicativo, podemos ejemplificar con estas oraciones: Me das el juego porque lo digo yo – Abres el libro por la página 6 o te vas de clase.
• Por último, en el caso de las imperativas negativas, conjugamos en presente de subjuntivo: No digas que lo te lo había advertido. O bien podemos usar el futuro de indicativo: No harás los ejercicios hasta las seis de la tarde.

Otras clases de oraciones que existen

Finalmente, encontramos también tres clases de frases que resumimos en este último tramo:

• Oraciones exclamativas: este tipo de oración se utiliza para expresar emociones o bien para enfatizar en algún punto del contenido del mensaje: ¡Qué bonito es el anillo que te ha regalado Marina!
• Oraciones desiderativas: también conocidas como optativas, expresan un deseo generalmente, usan el verbo subjuntivo, y suelen comenzar con ‘así’ u ‘ojalá’, entre otras palabras: Así te atragantes con el agua – Quien pudiera ser tú ahora mismo.
• Oraciones dubitativas: finalmente tenemos las dubitativas o de posibilidad, que se utilizar para expresar duda sobre el contenido del mensaje y que conjugan el verbo en indicativo o en subjuntivo: Posiblemente vaya a la playa este fin de semana – Igual mañana me levanto más temprano.